El Teatro de La Scala.

Cuando un incendio destruyó el antiguo Teatro Ducale en 1776, los dueños de los palcos le pidieron al archiduque Fernando de Austria que construyera un nuevo teatro. Así fue como el arquitecto neoclásico, Giuseppe Piermarini, diseñó lo que hoy se conoce como el Teatro La Scala.

La estructura original fue reestructurada en 1907, cambiando al diseño que conocemos actualmente. Pero en 1943, los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial afectaron a Milán y dañaron gravemente al teatro, el cual luego sería reconstruido.

En el año 2002 cerró sus puertas para una renovación y en 2004 fue reinaugurado. A pesar de que muchos no estuvieron de acuerdo con esta restauración, porque temían que se perdiera la identidad del edificio. Una vez terminado, quedó evidenciado que no había variado mucho en la estética.

Fundamentalmente, se amplió la parte de atrás del escenario para crear una zona de camerinos funcional y moderna, se eliminaron alfombras y pinturas que ocultaban el mármol original del edificio y se recuperaron decoraciones del siglo XVIII.

El Teatro La Scala cuenta en su interior con un amplio museo compuesto por una gran variedad de colección de pinturas, bustos, trajes y elementos relacionados con el mundo de la ópera.

Al ingresar por el vestíbulo se puede apreciar una estancia armoniosa a pesar de su escasa decoración. También es posible acceder a los pequeños palcos revestidos de terciopelo rojo, y ver las obras como lo hacían antiguamente los miembros de la alta sociedad.

El enorme interior del auditorio fue hecho en madera revestida con terciopelo, y decorado con estucos decorados en tonos dorados. Si levantas la vista, podrás contemplar la enorme araña de cristal de bohemia compuesta por 383 bombillas.

Por último, cabe destacar que el museo programa exposiciones temáticas temporales, vinculadas con el mundo de la ópera. Esto ofrece la oportunidad de contemplar desde los vestuarios que se utilizaban, hasta los instrumentos que han sonado con partituras de genios como Mozart, Verdi o Puccini.