La Fontana de Trevi, en busca de la suerte.

La Fontana de Trevi, de estilo clásico y barroco fue construida en su totalidad en mármol travertino, tiene una altura de 25,9 metros y un ancho de 19,8 metros.

En lo más alto de la fuente, en la fachada del Palacio Poli, se observa el escudo de armas del Papa Clemente XII, trabajo de Paolo Benaglia. Por debajo de este se encuentran cuatro esculturas que simbolizan las cuatro estaciones del año esculpidas por Corsini, Ludovisi, Pincellotti y  Queirolo. Cada una de estas esculturas coincide con una columna corintia. 

Continuando el descenso encontramos dos bajorrelieves que representan a la Ninfa Virgen señalando la fuente a los soldados de Agripa (obra de Bergondi) y a este dando la orden de construir el acueducto (obra de Grossi).

Del escultor Filippo della Valle son las esculturas femeninas que se encuentran en las hornacinas laterales, una representa la abundancia, la otra sosteniendo en su mano derecha una vasija de la que bebe una serpiente, simboliza la salubridad. En el Centro está la figura de Neptuno (de Pietro Bracci) de pie sobre un carro con forma de concha que está tirado por dos caballos guiados cada uno de ellos por un tritón, uno mayor y el otro joven. 

Uno de los caballos está agitado mientras que el otro no, esto simboliza las diferentes facetas que podemos encontrar en el mar, el mar agitado y el mar pacífico. La escena se sitúa sobre rocas donde no faltan plantas y multiformes criaturas.