La Giralda, testigo de la historia de Sevilla.

El diseño de la torre se inspiró en la Torre de Hassan de Rabat y en la Torre Kutubía de Marrakech, ambas en Marruecos. Este emblemático edificio de Sevilla mide casi 105 metros de alto y se caracteriza por su campanario, agregado luego de la Reconquista de Sevilla por los cristianos en el siglo XIII.

Las campanas que allí suenan se utilizan para marcar las horas y para anunciar eventos importantes en la ciudad.

A su vez, la torre cuenta con una rampa en lugar de escaleras que se diseñó para permitir un fácil acceso a la cima ya sea en caballo o burro. Además, gracias a que es amplia y tiene una inclinación suave, la hace accesible para personas con discapacidades físicas.

Mientras que, en la parte superior de la torre hay un mirador con vistas panorámicas de la ciudad, al que se accede a través de una escalera de caracol. La cima también está coronada por una estatua de bronce de El Giraldillo, que representa la fe cristiana y que fue añadida en el siglo XVI.